martes, 28 de junio de 2011

Bosques

Me gustan mucho los bosques, sobretodo, y aunque suene típico, en otoño, con tanto color suelto. No me digáis que no es una maravilla esa paleta de colores. Para mi la quisiera. Y aunque no la tengo ni de lejos, sí que probé a reproducir un bosque en un lienzo. Es óleo sobre tela, y es una serie de dos cuadros, uno más grande y otro más pequeño, que van uno al lado del otro.

Están prácticamente los dos terminados, pero aquí tenéis el making of del primero:

Primero marqué dónde se situaría cada árbol.





Después, por probar la técnica del óleo, remarqué los troncos con los colores del otoño: blanco, rojo, marrón... dándoles luz y sombra.




El fondo iba a ir difuminado, así que seleccioné los colores que quería para él y los estampé, ya difuminándolos y fusionándolos entre ellos.




Y por último, rematé pequeños detalles a modo de hojas y demás cosas.




Yo creo que un cuadro así (o dos, en este caso) dan calidez a la habitación, además de originalidad. :D
Para el próximo lienzo, que ya me espera en el caballete, voy a probar con un cuadro de acuarelas que promete mucho!

Y antes de despedirme, mirad que bichito tan curioso encontré en la montaña: una monada!

martes, 21 de junio de 2011

¡¡¡Ya es verano!!!

Por fin! A mucha gente no le gusta porque hace mucho calor, porque se aburren... por lo que sea. Pero el verano es mi estación del año favorita y me encanta disfrutarla como sea. Ya he ido a la playa este año, y por eso me inspiré para hacer algo. Una se inspira de todo lo que puede, ajajjaja

Y entre las piedras de la playa y el buen tiempo, decidí hacer una caja para guardar todos los cacharritos que siempre recojo, ya sean conchas o piedras o arena. Y aquí la tenéis (cabe decir que ya la tengo llena y me tocará hacer otra :D)




Hacerla es facilisimo.


Aproveché que no tengo cajas de madera, solo de cartón, para sacarle "bultos" a mi madre de en medio. Cogí una y la llené de cola por todos los lados, eso sí, poco a poco.





Después pegué la servilleta con un motivo muy adecuado. Las solapas de la caja también se cubren, eh?





Y cuando ya estuvo seco el exterior, otra capa de cola para que quede más brillante, como si fuera un barniz.





El interior lo pinté primero con una capa de pintura acrílica blanca, que sería la base, y después le d unas pinceladas con color gris, a juego con las piedras. Le da un bonito toque medio envejecido medio empedrado.




Y finalmente la llené con las conchas que llevo tiempo guardando!




Fijaos en la playa tan preciosa que tengo cerca. Es una cala genial a la que me encanta ir y caminar por las rocas (si no me caigo y me abro dos brechas en una, claro...)

domingo, 19 de junio de 2011

FIMO Dulce

Mañana voy a ver a mi abuela. Y siendo una tarde de domingo rara, lo mejor que podía hacer era prepararle un bonito detalle. Y se me ocurrió un detalle dulce. Unos imanes con forma de pastelitos, hechos de FIMO y con mucha hambre, jajajaj



Aquí los tenéis. Son dos especímenes de lo más comunes: Tarta de chocolate y fresa y un donuts con glaseado y confetis de colores.


No tienen más complicación: amasar el FIMO, darle forma de pastel, evitando que caigan las babitas, y hornear como se hornea un pastel de verdad, es decir, con cuidado de que no se queme.






Cuando salgan del horno y ya no quemen, se les da unas pinceladas de esmalte para que reluzcan y tengan una pinta aún más apetitosa. Quedan muy auténticos.




Y finalmente, con una cola fuerte, pegamos los dos imanes en la parte trasera. Un consejo, aseguraos de que lo pegáis por la parte correcta. No son los primeros que hago, y aprendí que si pegas mal el imán, se cae... :S






Y ya veis, unos imanes originales, apetitosos y hechos en un momento. Seguro que a mi abuela le encantan!


Los anteriores imanes que hice se los apoderó mi madre y están acampados en la nevera como si fueran del 15-M.





Hoy también he podido dar un regalo que tenía pendiente para mi amiga Soraya. Era una postal y unos pendientes a juego. Los pendientes están hechos también con FIMO y muy pensados para ella, al igual que la postal.








Y aquí está el pequeño Perchita, que no para de crecer y que hoy ha sufrido la tortura que le supone una ducha, ejejjeje

sábado, 11 de junio de 2011

Guardadito está más guapo

He hecho una caja nueva! Era una caja que le regalaron a mi madre, de cartón, y que contenía un bonito pañuelo. Yo, como pañuelos ya tengo, me fijé más en la caja. Después de varios mama damelas y varios porfas q tú no la quieres, conseguí la tan ansiada caja y empecé a hacerle de todo a la pobre. Mirándola fijamente, me acordé de ese gran programa de mi infancia Art Attack (anda que no me pasé sábados pegada a la tele por ver al manitas!!) y cola blanca en mano, papel higiénico por la otra (quiero apuntar que después de varias amenazas de mi madre, no gastaré nunca más el papel higiénico en vano...) forré la caja. Quedó con una textura rugosa y blanca muy bonita cuando se secó la cola. Pero... ¿blanca? ¿Sólo blanca?? No no y no. Ahí estaba mi lazo de tul púrpura para darle la gracia final. Eso, y el papel de seda, que no sé yo lo que va a durar... ¡cómo para empapelar un piso de 30 metros cuadrados en Madrid!






Eso, y un poco de gracia poniendo unos geles dentro, y ¡voilà!





Ya de paso, aprovecho para enseñaros algunas de mis primeras cajas. La mayoría se las he endosado a mi madre, porque yo no tengo más sitio, pero seguiré haciendo cajas, porque me encanta!



Estas cajas de diferentes tamaños sirven ahora de joyero en la mesita de noche de mi madre, muy bien empleadas.





Dos cajas con motivos cafeteros (me encanta el café, no lo puedo evitar) y de chocolate (que aún me gusta más).




Después de elaborar unos mini pastelitos de fimo, los coloqué encima de una cajita pequeña que decora de la forma más dulce posible (advierto, no se pueden comer... una lástima).


En fin, tengo otra caja entre manos, pero es para un regalo muy especial, así que no la cuelgo de momento para que no la vea aún! Eso sí, dejaré de a un lado por fin el color púrpura.

martes, 7 de junio de 2011

La vie en pourpre

Desde que he descubierto el papel de seda estoy emocionadisima. Ya sé que no he descubierto las américas. Pero trabajar con este papel me ha encantado. Además, elegí un color precioso, el púrpura.

Si a eso le añadimos que encontré enterrada debajo de mil papeles una carpeta del año de María Castaña (es decir, leyendo entre líneas, de cuando iba al Instituto), con eso me viene ya la inspiración.

Cogí la carpeta y unas cartulinas y me puse a forrarla. Para este trabajo, la cola blanca es mi heroína (de héroe, no os vayáis a pensar...). Una vez hecha, quise añadirle unas letras, por aquello de decorarla un poco. Y qué ilusión cuando descubrí que en la librería del pueblo hay... GOMAEVA!!!!!!!! Sí!!!!! Allá que me fui yo y mi gomaeva recién comprada a decorar la carpeta. Pero aún veía que le faltaba algo. Y volví a la librería en busca de algo que me sirviera. Y fue ahí cuando lo vi. Arriba del todo en una estantería. Brillando. Esperándome. Un paquete por estrenar. Y de color púrpura. Maravilloso. Y me lo llevé. Y con la cola en una mano, el pincel en la otra, y el papel de seda en la boca, la carpeta no se me resistió. A mi personalmente me encanta!



Con recortes de papel de seda que sobraron al forrarla, se me ocurrió rematar la faena con unas florecitas y unos lazos, que siempre quedan bien, y con cinta de tul de color morado que me parece un detalle precioso. Y aquí está la carpeta!




Además, justo hoy mi madre terminó de vaciar una caja de cartón de cosas de la cocina, de esas cajas que todas las madres desmontan y las apilan para tirarlas al contenedor correspondiente. Pero antes de que la despedazara, me abalancé sobre la caja. Tenía aún papel de seda y era peligrosa. Y la caja ha sido también mi víctima. Ella, y la cola blanca, que el pobre bote está ya exprimido.







Y caja y carpeta ya forman parte de mi colección!

miércoles, 1 de junio de 2011

Temporada de bodas

El otro día me di cuenta de que mi fimo blanco y negro se estaba echando a perder. Como me da mucha rabia tener que tirar las cosas, decidí usar ese fimo cuanto antes. Siendo blanco y negro, solo se me ocurrían dos cosas por hacer: dos pingüinos, o dos novios. Los que me conocen saben que nunca nunca haría lo primero, así que me puse a buscar modelos de figuritas de novios, y allá que me fui. Me costó bastante, porque hacer/dibujar personas no es lo mío. Y vestirlos adecuadamente tampoco era nada fácil. Pero no me disgusta el resultado para nada, siendo solo los primeros.


La novia de fimo, con flores en miniatura hechas de papel.




La pareja, aun sin la cara, que la dibujé con permanentes.



Y buscando los modelos de figuritas (que, por cierto, al final los hice como me salieron, osea, de milagro), encontré algo espectacular. Una chica decía en su blog que se casaba (ya la he felicitado eh?) y posteó en su página un WEDDING PLANNER (sí, se llama así). Cuando se me quitó la cara de "y esto qué es????" leí un poco más y la idea me encantó. Resulta que con una carpeta de esas de toda la vida, de las azules baratitas, esa chica se había personalizado una carpeta preciosa (aunque fuera rosa) en la que pondría todas sus ideas, facturas y todas esas cosas de las bodas. Yo evidentemente no lo voy a usar, pero quise probar si me saldría una idea así, y creo que no ha quedado nada mal. Si hay alguna futura novia por ahí y lo quiere, que me lo diga :P


Portada. La carpeta está forrada con papel de regalo azul y crema.



Los remates están hechos con puntilla de nylon en color crema también.



A parte, puse algún detalle de flores de papel y el dibujo del vestido de novia.



Y en el interior, también forrado de azul, coloqué dos sobres en el mismo color, con letreros sobre crema, donde colocar fotos y demás.

Lo dicho, si alguna se casa, lo puede usar! Yo la idea ya la he hecho y me he quedado ancha!